El maestro del suspense


Nadie podía sospechar en 1919 cuando Hitchcock trabajaba como rotulista en películas mudas, que llegaría a ser el director de cine más conocido de todo los tiempos.
En respuesta a un periodista sobre cómo concebía él el cine, éste contestó que se trataba de llenar cuatrocientas butacas. Con esa singular respuesta, podemos resumir parte de su larga trayectoria cinematográfica; nadie como él mantenía al espectador pegado en su butaca, ojiplático y con la respiración entrecortada, llenando día tras día las salas de todo el mundo con películas tan llenas de suspenso como de gran calidad.

En un encuentro que tubo con Truffaut, el cineasta londinense trataba de explicarle en que consistía el éxito de sus historias cinematográficas.
«Ahora mismo estamos conversando. Si hubiera una bomba debajo de la mesa, nadie se habría enterado. Nuestra conversación es anodina, no pasa nada especial. Si lo filmáramos así, de repente habría una explosión. El público quedaría sorprendido, pero antes de estarlo, habría sido testigo de una escena aburrida, sin interés. El suspense consiste en filmarlo de otra manera, dándole información privilegiada al espectador. Por ejemplo, se le muestra que un anarquista pone la bomba bajo la mesa, con un reloj que indica que estallará a la una. Un reloj en el decorado informa de que es la una menos cinco. La misma conversación anodina se vuelve más interesante, pues el público se pone nervioso. Le entran ganas de levantarse y gritar a los personajes que no hablen de tonterías, porque va a haber una explosión».

 
Pero no toda su obra estuvo caracterizada por producciones del género del suspense. No fue hasta su tercera película, cuando nos encontramos con el verdadero estilo del maestro. Cabe destacar que curiosamente el talante cinematográfico que le dio fama mundial, lo cultivó con la literatura de autores románticos como Allan Poe.
«Fue el público el que me encasilló en el suspense. A mí me hubiera gustado rodar La Cenicienta, pero el público estaría esperando en todo momento que hubiera un cadáver
».
Su popularidad en Europa era impresionante y Estados Unidos se arrodillaba ante el nuevo mesías británico. Fue en 1939 cuando finalmente se traslada al continente americano, al puerto de Nueva York llegó con sus maletas cargadas de su trabajo realizado en su tierra natal. Ya quedaba lejos el estreno como director de su primer trabajo, Número 13 que se rodó en 1923 pero lamentablemente no llegó a finalizarse. En 1925 graba en Alemania "El jardín de la alegría", una producción germano-británica que se haría muy popular, en 1925 llegaría el cine sonoro a su obra y grabó "La muchacha de Londres", más tarde las famosas "Asesinato" en 1930, "El hombre que sabía demasiado" 1934 y "39 escalones en 1935". En tierra americana, comenzaba una nueva época en su carrera, en la que las grandes estrellas de Holywood trabajarían bajo las órdenes de Hitchcock.
La persona que lo convenció para que cruzara el charco fue David Oliver Selznick, gran productor que entre otras fue el artífice de Lo que el viento se llevó. Un contrato millonario a cambio de varias películas; la primera, una adaptación de la novela de Daphne Maurier, "Rebeca" en 1940. Este melodrama gótico explora los miedos de una ilusionada y joven esposa (Joan Fontaine), que se traslada a Gran Bretaña y debe luchar con un marido distante (Sir Laurence Olivier), una ama de llaves demasiado posesiva (Judith Anderson) y la memoria de la primera esposa fallecida de su marido: la bella y misteriosa Rebeca. El film obtuvo once nominaciones al premio Oscar. Pero John Ford se llevaría ese año el premio al mejor director por "Las uvas de la ira" (conocida también como Viñas de ira), arrebatándoselo al británico, que jamás ganaría una estatuilla, salvo el premio en memoria de Irving Thalberg, de carácter honorífico. Aparte de esto, empezaron a surgir los primeros problemas entre Selznick y Hitchcock. Y es que el director británico no podía soportar las restricciones fílmicas y artísticas del productor.
La segunda película americana de Hitchcock volvería a estar centrada en Europa. "Corresponsal de guerra" también fue nominada a mejor película. El film fue rodado en el primer año de la Segunda Guerra Mundial y estaba inspirada en los rápidos cambios que experimentaba Europa en esos momentos, descritos por el corresponsal de un diario norteamericano, Joel McCrea. El film mezcló decorados construidos en Hollywood con escenas de la Europa real. Conforme a la censura del Código de Producción de Hollywood, la película evitó referencias directas a Alemania y a los alemanes.
A partir de este momento y durante las tres décadas siguientes, dirigió películas en Hollywood a razón de una por año, reservándose en todas ellas una breve aparición (cameo), siempre sin diálogo. 


 
Posteriormente llegaría "Sospecha" en 1941, protagonizada por Cary Grant, con quien mantuvo una gran amistad. Alfred siempre procuraba escoger para sus películas actores y actrices ya conocidos por alguna faceta, ya fuera la de la sensualidad, la simpatía o la seducción, pensando que así el papel quedaba más fácilmente definido desde el principio. Otro de sus grandes actores fetiche sería James Stewart, con quien coincidiría por primera vez en "La soga "en 1948.
En 1944 crea su propia productora junto con Sidney Berstein: la Transatlantic Pictures. Ese mismo año, comienza a trabajar con Ingrid Bergman, la primera rubia "hitchcockiana" por la que sentía fascinación. Rueda "Encadenados" en 1946, protagonizada con Cary Grant. Según el propio Hitchcock, refirió en una entrevista que prefería protagonistas rubias porque las consideraba más misteriosas. en 1946 junto con Ingrid Bergman y Gregory Peck rueda Recuerda, una película sobre el psicoanálisis, cuyo detalle más importante es la colaboración de Salvador Dalí, que diseñó y elaboró los decorados de la escena del sueño.
En 1948, Bergman deja de actuar con Hitchcock para trabajar con el también director Roberto Rossellini. Eso fue un gran golpe para Hitchcock, pero no tardó en recobrar su confianza conociendo a la que convertiría en su nueva musa, Grace Kelly, con la cual dirigiría "La ventana indiscreta" en 1954,protagonizada por James Stewart, "Crimen perfecto" en 1954, protagonizada por Ray Milland, y "Atrapa a un ladrón" en 1955, protagonizada por Cary Grant.
Según el director, la película de su cosecha que más apreciaba era "Falso culpable", en 1957, protagonizada por Henry Fonda y Vera Miles. En 1958 estrenó "Vértigo," protagonizada por James Stewart y Kim Novak.
En 1959 rueda "Con la muerte en los talones" protagonizada por Cary Grant y Eva Marie Saint entre otros su imagen de Cary Grant huyendo de una avioneta por los campos es ya una imagen inolvidable por los cinéfilos. Es considerada una de sus mejores películas.
En 1960 rueda "Psicosis", protagonizada por Anthony Perkins y Janet Leigh, uno de los mayores éxitos de su carrera, la cual contenía una de las escenas más impactantes de la historia del séptimo arte: el asesinato de su protagonista, Janet Leigh, en la ducha a mitad de la película. En esta película, el maestro mostrará ser un adelantado a su tiempo con un novedoso trailer
de la obra presentado por él mismo.

 
En 1963 dirige "Los pájaros", protagonizada por Tippi Hedren y Rod Taylor, su protagonista se convierte en la nueva musa rubia, con la que mantuvo una actitud muy posesiva y junto con la que más tarde rodaría "Marnie la ladrona" en 1964 protagonizada junto a Sean Connery.
Entre 1966 y 1969 las críticas se volvieron en su contra. "Cortina rasgada" con Paul Newman y Julie Andrews, y "Topaz" con Frederick Stafford y Claude Jade, no tuvieron apenas éxito. Se decía que se esperaba un cambio de estilo. El propio Hitchcock lo buscaba, como prueban las imágenes encontradas en "Frenesí" en el año 1972, protagonizada por Jon Finch, donde encontramos técnicas cinematográficas, desnudos y secuencias de una actualidad sorprendente. Pero el proyecto resultaba tan revolucionario como arriesgado y eso podía suponer la caída definitiva de Hitchcock como director. Así que los estudios Universal Pictures le denegaron el proyecto.
En 1976 rueda "La trama", su última película, protagonizada por Karen Black y Bruce Dern.
Los críticos de la época fueron excesivamente severos con la parte final de la carrera del gran genio, que nos dejó a los ochenta años de edad, una de las mejores cinematecas que ningún director ha dejado, y que mucho me temo, dejará jamás.


DOCUMENTAL DONDE SE ANALIZA LA OBRA DEL MAESTRO




FILMOGRAFÍA
Number 13 (Number 13) (1922)
El águila de la montaña (The Mountain Eagle) (1925)
El jardín de la alegría (The Pleasure Garden) (1925)
El enemigo de las rubias (The Lodger) (1926)
Downhill (Downhill) (1927)
Easy Virtue (Easy Virtue) (1927)
El ring (The Ring) (1927)
Champagne (Champagne) (1928)
The Farmer's Wife (The Farmer's Wife) (1928)
The Manxman (The Manxman) (1929)
La muchacha de Londres / Chantaje (Blackmail) (1929)
Elstree Calling (Elstree Calling) (1930)
Juno and the Paycock (Juno and the Paycock) (1930)
Asesinato (Murder!) (1931)
Juego sucio (The Skin Game) (1931)
El número 17 (Number Seventeen) (1932)
Mejor es lo malo conocido / Ricos y extraños (Rich and Strange) (1932)
Ricos y extraños (1932)
Valses de Viena (Waltzes from Vienna) (1933)
El hombre que sabía demasiado (The Man Who Knew Too Much) (1934)
39 escalones (The 39 steps) (1935)
Sabotaje (Sabotage) (1936)
El agente secreto (Secret Agent) (1936)
Alarma en el expreso (The Lady Vanishes) (1938)
Inocencia y juventud (Young and Innocent) (1938)
La posada de Jamaica (Jamaica Inn) (1939)
Enviado especial (Foreign Correspondent) (1940)
Rebeca (Rebecca) (1940) Oscar. Mejor película 1940
Un matrimonio original (Mr. and Mrs. Smith) (1941)
Sospecha (Suspicion) (1941) Oscar. Mejor actriz 1941
Sabotaje (Saboteur) (1942)
La sombra de una duda (Shadow of a doubt) (1943)
Náufragos (Lifeboat) (1944)
Recuerda (Spellbound) (1945)
Encadenados (Notorious) (1946)
El proceso Paradine (The Paradine Case) (1947)
La soga (Rope) (1948)
Atormentada (Under Capricorn) (1949)
Pánico en la escena (Stage fright) (1950)
Extraños en un tren (Strangers on a Train) (1951)
Yo confieso (I Confess) (1953)
Crimen perfecto (Dial M for Murder) (1954)
La ventana indiscreta (Rear Window) (1954)
Atrapa a un ladrón (To catch a thief) (1955)
Pero ¿Quién mató a Harry? (Teh trouble with Harry) (1955)
El hombre que sabía demasiado (The man who knew too much) (1956)
Falso culpable (The Wrong Man) (1957)
Vértigo (Vertigo) (1958)
Con la muerte en los talones (North By Northwest) (1959)
Psicosis (Psycho) (1960)
Los pájaros (The Birds) (1963)
Marnie, la ladrona (Marnie) (1964)
Cortina rasgada (Torn Curtain) (1966)
Topaz (Topaz) (1969)
Frenesí (Frenzy) (1972)
La trama (Family plot) (1976)